Fobias

Fobia o ansiedad social

La fobia social constituye un temor acusado y persistente por alguna situación social o pública en las que la persona se siente expuesta a personas extrañas o a la posible valoración negativa de los demás. Encontrarse ante una situación social provoca invariablemente una respuesta de ansiedad, por ello, es frecuente la evitación de situaciones sociales por el temor o malestar que produce imaginar la presencia o  una hipotética evaluación negativa por parte de los demás. Puede estar circunscrita a un problema concreto como hablar en público o haberse generalizado a varias situaciones. En muchos casos hay un antecedente de timidez en la infancia y adolescencia. Suele haber asociado algún recuerdo de alguna situación social negativa lo cuál mantiene inseguridad, una autoevaluación negativa y ánimo bajo.

Fobias específicas

Las fobias específicas se definen como miedos desproporcionados ante la exposición a un estímulo fóbico que provoca inmediatamente una respuesta de ansiedad y que en ocasiones puede ser en forma de crisis de angustia. Por lo general las situaciones fóbicas se evitan para esquivar el malestar que provocan. Los comportamientos de evitación y anticipación ansiosa interfieren en la rutina de la persona, en la vida social y en la actividad laboral. La persona es consciente que la reacción de miedo es excesiva e irracional, pero se escapa totalmente de su control. Normalmente, la propia reacción de evitación es la que hace que la fobia se mantenga en el tiempo.

 

Los tipos de fobias más frecuentes son:

 

- Animales: Arañas, ratones, reptiles.

- Ambiente: Tormentas, alturas, agua, fuego.

- Enfermedades: Inyecciones, pruebas médicas, sangre.

- Situaciones: Ascensores, aviones, trenes, recintos cerrados.